Dentro del universo de las relaciones públicas hay diferentes factores a tomar en cuenta, se puede medir la reputación, la fidelidad con la marca o simplemente el costo que tiene determinado espacio para el cliente.
Es importante recordar que cada esfuerzo realizado por una compañía debe ser medido en términos de conversión y resultados obtenidos a partir de la cantidad invertida en ello y justo eso es lo que hace el ROI.
El ROI (Return On Investment) o retorno de inversión es el valor económico generado como resultado de la implementación de diferentes acciones.
Este indicador nos permite medir el rendimiento que hemos obtenido de una inversión.
¿Qué se puede medir?
El ROI permite calcular la rentabilidad de casi cualquier cosa, algunas son:
- El desempeño de una o varias redes sociales (las ventas que generan, clientes potenciales, etc.).
- Una pieza de contenido (como parte de una estrategia con influencers, por ejemplo, o una pieza dirigida exclusivamente a mover ventas).
- Un blog (por ejemplo, cuántos clientes potenciales han llegado a través de este y cuánto dinero representan).
- Un sitio web (ventas, clientes nuevos, etc.)
También el engagement, que es es un concepto utilizado para significar el nivel de interacción de la audiencia con una marca en sus comunicaciones.
Con esta métrica tendrás una visión de la efectividad de tus estrategias de RP Digital.
Ya que al publicar todo tipo de contenidos e interactuar con los seguidores de tu marca, no sólo conseguirás awareness, sino también la confianza y adhesión de tus seguidores y que tu marca se posicione como autoridad en determinado tema. Los KPIs se definen con base en las interacciones en medios sociales, tales como likes, shares, retuits, comentarios,
Es por lo anterior, que este tipo de metricas o mediciones resultan primordiales.
No solo para conocer la eficacia de tu campaña o producto, sino para darle un valor monetario a tu inversión.
